No es mirar; Es VER. No es cualquier visión; es esa VISIÓN desde el adecuado punto de vista, la que te hará ganar la diferencia.
POTENCIÁ TU ADMINISTRACIÓN
Todo el empeño
que dediqués a optimizar una tarea, el uso o aplicación de una herramienta o tu
propia mejora personal, será absolutamente perjudicial, y hasta peligroso, si
no has contemplado con ello el desempeño integral de todo tu negocio o empresa.
ASÍ LO HAS VISTO
Por tratarse de
un sistema orgánico, prevalece la condición de interdependencia. Por esta vital
causa, el sistema no mejorará consecuentemente con el aumento de desempeño de
una sola de sus funciones.
Hasta incluso, el conjunto integrado puede
autodestruirse por eso.
En el extremo
de los ejemplos encontrás el clásico de “empresarios ricos y negocios pobres”,
que al cabo de un tiempo, concluye con la extinción de la unidad de negocios.
Pero, para un ejemplo
más corriente e ilustrativo, apelemos a esos cientos de negocios con los que
compartís el ecosistema empresarial de tu ciudad, que por años permanecen en similar
nivel de desempeño, con apenas magros resultados.
Estos, además
de la permanente lucha sin tregua por la supervivencia diaria, en buen número comparten
el contar con esforzados gerentes, o propietarios gerentes.
A su vez ellos, capitalizan por
año horas de capacitación y práctica en la especialidad que particularmente dominan,
aquella que generalmente constituye el factor crítico con que consiguieron ese
primer éxito en el mercado y estimuló el ideal de constituir el negocio y,
hasta incluso, pensarse como empresarios.
Pero, el tiempo
pasa y, el anhelado salto cuántico que cristalice en dignos resultados sustanciales
y sostenibles sigue siendo esquivo.
LA CAUSAL DETERMINANTE
Toda la
optimización dedicada al perfeccionamiento de una persona, o la específica
optimización en una tarea o proceso, aporta magramente al equilibrio dinámico
funcional que el todo orgánico requiere, generando incluso, en el peor de los
casos, efectos colaterales impensados y absolutamente contraproducentes.
TU DEBER GERENCIAL
Si pretendés
sacar a tu iniciativa emprendedora o negocio de un estado embrionario o neonatal,
para consolidar una empresa, se te exigirá como administrador (o propietario gerente)
una mirada diferente:
#1. Que enfatíces tu dedicación en el todo integrado del sistema organizacional a tu cargo.
#2. Que tengás presente que la sola atención de partes específicas de ese todo, sólo ha de contribuir marginalmente, y resta a cualquier intento de consolidación en el tiempo.
#3. Que, trabajés por ese necesario equilibrio dinámico armonizando:
- La administración comercial;
- La administración productiva; y,
- La administración de innovaciones.
sirviéndolas consistentemente con el aporte de los sistemas de servicios,
proveedores de capital humano, físico y monetario.
Quizás, lo que se te exige, sea una visión como ésta:
COMENZÁ DE INMEDIATO
Aún con sencillas implantaciones, si bien controladas, podrás notar
incipientes cambios favorables en el lapso de un primer trimestre de ejecución.
¡Éxito!
Es un producto Asesor empresarial de Gallart & Co.
“El DESARROLLO es inherente a las energías humanas más que a la riqueza económica”
Sólo si ADMINISTRAS ambos ¡Lo lograrás!
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